Más allá de su muerte

Se considera Mozart como autor de unas 754 obras de las cuales 26 están desaparecidas; el resto están impresas, excepto 14 de terminadas y algunas de inacabadas. Todas ellas son fruto de la inspiración, del estado natural, de Mozart. Están escritas para la ópera, la misa, la sinfonía, el divertimento, para oratorios, cuartetos y sonatas, pequeñas composiciones o danzas, para todos los instrumentos de la orquesta, para el piano, el órgano o instrumentos de cuerda, madera o metal. Para todo aquello que pedían. Mozart cumplía con los encargos.

Hoy en día podemos encontrar todas estas obras guardadas y clasificadas en la Biblioteca del Estado, en Berlín. Allí se clasifican en música vocal y música instrumental. La primera tiene siete subdivisiones y la segunda dieciocho.

El trabajo del compositor se divide en los siguientes periodos cronológicos:

-          De 1762 a 1770: cuando crea unas 100 obras de carácter religioso, arias, sinfonías, composiciones para piano y violín y obras diversas.

-          De 1771 a 1780: entonces compone alrededor de 250 sinfonías, obras orquestales, sonatas para órgano y cuerda y composiciones para piano.

-          De 1781 a 1791: casi 300 composiciones forman el periodo más fecundo de todos con canciones de acompañamiento para piano, obras para violín y música para diversas voces.

Fueron muchos los músicos contemporáneos a este genio, entre ellos podemos destacar a Gluck, Haydn, Schubert, Haendel, Juan Cristian Bach, Hasse o Piccini. A Haydn lo consideró siempre no sólo "maestro" sino también amigo leal. La obra de Mozart sólo quedó considerada como etapa de paso para Beethoven que, a la vez, fue alumno de Haydn.

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